La Iglesia de Santa María del Coro es una de las Iglesias más carismáticas de la ciudad y una de las mejores cosas que ver en San Sebastián si te gusta este tipo de edificios. Se le tiene un gran cariño a esta iglesia, tanto creyentes cómo no creyentes ya que es parte de la historia de Donosti.
El inicio de su construcción tal y como la conocemos hoy en día data de 1743. Con anterioridad ya existía la iglesia de Santa María en ese lugar adosada a los muros de las fortificaciones de la ciudad. El diseño se le atribuye a Pedro Ignacio de Lizardi si bien influyeron en él también Miguel de Salezán y Domingo de Yarza. El 27 de abril de ese año fue colocada la primera piedra, siendo uno de los acontecimientos más populares de la ciudad y día festivo para todos en la capital de Guipuzcoa. La obra duró 21 años hasta que en 1764 se dio por terminada.
La iglesia de Santa María fue construida en el ángulo formado por la calle Mayor y la calle Trinidad, calles que lucieron sus mejores galas el día de la inauguración. En la actualidad, llama la atención que desde la puerta de la iglesia se puede mirar al frente y tras atravesar la ciudad con la vista puedes llegar a ver en el otro extremo la puerta de la Catedral del Buen Pastor, situadas una frente a la otra sin ningún edificio de por medio.
Junto con la Iglesia de San Vicente, Santa María es la iglesia más importante de la Parte Vieja y una de las iglesias más representativas.
Si vienes de visita, no puedes dejar de visitar la Iglesia de Santa María. El edificio bien merece la pena ser visitado y su interior hace que sea una de las iglesias más bonitas que podéis ver hoy en día.